Rafael Guenchenen, secretario adjunto del Sindicato Petrolero y Gas Privado, en diálogo con NOVA, dio más detalles de la situación: “Nosotros estamos en conciliación obligatoria que fue dictada por el Ministerio de la Nación (por salario). Tuvimos un gran paro y movilización el día 25 de abril con Camioneros y la CGT Zona Norte”, contó.

“Le pedimos a la provincia es que actúe contra Sinopec utilizando los mecanismos de la provincia para exigirle inversiones”. En esta línea, el gremialista agregó: “Es la segunda cadena más importante de Santa Cruz y no están invirtiendo en la producción de petróleo”.

Guenchenen, además, explicó que el conflicto va más allá de su sector: “Este no es un reclamo solamente de petroleros porque la provincia depende de las regalías para el pago de salarios de la administración pública y la inversión de la provincia. Es el ingreso más importante y la más interesado en que Sinopec invierta tendría que ser justamente la provincia. Hay un Estado ausente”, disparó fulminante.

El gobierno de Alicia Kirchner, en este sentido, “se mantiene al margen y no se pone a la altura de las circunstancias para presionar a Sinopec”. Pero hay más sospechas al respecto, que revocarían de una importante gravedad: “Al parecer hay un pedido muy fuerte de adelanto de las regalías a todas las operadoras”, reveló el Adjunto. Este detalle podría dejar sin fuerzas al gobierno para velar por los intereses estatales como correspondería.

Pero también el conflicto es de índole salarial: “No llegamos a un acuerdo en las últimas negociaciones de paritarias. Tenemos otra audiencia el viernes”, contó el entrevistado. De esta forma, el conflicto contiene un doble eje.

Por último, “si no muestran un plan de inversión coherente y responsable, garantizando la fuente laboral de todos los trabajadores que operan en todos los yacimientos de Sinopec, nosotros vamos a seguir en esta misma línea: reclamando a favor de nuestros afiliados”, concluyó Guenchenen.