El conflicto entre el gobierno de Alicia Kirchner y la Asociación de Docentes de Santa Cruz (ADOSAC) parece no tener fin. Desde el gremio exigen que se abran las negociaciones paritarias por mejoras salariales.
Mientras tanto, se está llevando a cabo un paro de 96 horas que llegará hasta el próximo viernes, y ya hubo un comunicado respecto a que, si el reclamo no es escuchado, la medida de fuerza se extenderá a lo largo de toda la semana que viene. En el medio, los chicos siguen sin tener clases en la provincia.
Pablo Lombroni, secretario de ADOSAC de Gobernador Gregores, habló de que “la adhesión al paro del gremio la semana pasada tuvo un promedio de 78 por ciento”, y destacó que “hay grandes riesgos y costos, sabemos que la lucha es así, por eso activamos los fondos de huelga. Esta es la realidad que tenemos que afrontar y no tenemos otro camino”.
Desde el sindicato, señalaron: “Deben dar un aumento salarial que saque a los docentes de la línea de la pobreza y sea acorde a los costos de la Canasta Básica Total”. Nicolás Pereyra, el secretario general de la filial Río Gallegos, manifestó que la medida de fuerza tomada “responde al silencio permanente, destrato y ninguneo del Poder Ejecutivo”.
“Ya ni siquiera estamos exigiendo todas las cuestiones que hacen a la demanda docente, sino la simple posibilidad de que haya paritarias y uno pueda dialogar y negociar”, apuntó.
Por otro lado, también se expresó al respecto la diputada nacional, Roxana Reyes, quien responsabilizó a la gobernadora, Alicia Kirchner: “Es evidente que el Gobierno no quiere resolver el problema, no le importa ni la educación, ni los niños, ni los padres ni los docentes”.
“No se garantiza un derecho tan importante como este, de 34 días hábiles sólo hubo clases 16”, dijo y cerró: “La tragedia es irreversible, quieren a los chicos menos formados y preparados para su futuro”.
