El informe añadió que si se acota al primer trimestre la caída se hace algo más profunda al llegar a 120.000 empleos (0,9 por ciento menos desde diciembre). Los asalariados públicos y privados registraron, en conjunto, una pérdida de casi 165 mil puestos de trabajo (96 mil y 69 mil menos, respectivamente).

Por su parte, el cuentapropismo registrado -principalmente monotributo– sumó alrededor de 40 mil empleos, lo cual moderó el impacto sobre el total del empleo formal. El ajuste del sector público no solamente impactó en la planta del Estado, sino también en el sector de la construcción producto de la parálisis de la obra pública (tampoco la obra privada siguió un sendero muy diferente en el recesivo primer trimestre).

En este sentido, se perdieron más de 42 mil empleos formales en este sector, representando una caída del 10 por ciento. Los otros sectores que más se vieron afectados en el comienzo del año fueron actividades empresariales (11 mil empleos formales menos) y la industria (10 mil menos), principalmente afectada por el freno en la actividad textil, metalmecánica, entre otras industrias ligadas a la construcción.

A nivel provincial, sin dudas la pérdida más importante en lo que a empleo hace es en el rubro de la construcción. La paralización de la obra de las represas hidroeléctricas Gobernador Jorge Cepernic y Presidente Néstor Kirchner implicó una cesantía de alrededor de 1.800 obreros de la construcción. Pero también se frenaron varias obras públicas que contaban con financiamiento nacional.

Al respecto, quien habló del tema fue Bautista Simón, el presidente de la Cámara de la Construcción de Santa Cruz, quien -en diálogo con La Opinión Austral- expresó: “Estamos atravesando una paralización sin precedentes de la obra pública, por la política de cero obra pública por parte del gobierno nacional. Con el fin de lograr el déficit cero, que no es real ya que nación no paga las deudas contraídas de las obras que estaban en ejecución”, expresó.

Asimismo, mencionó que en abril la caída de venta de insumos para la construcción fue del 30 por ciento, mientras que la caída de la construcción en abril a nivel nacional fue del 37 por ciento. “Las empresas llevamos 7, 8 meses sin facturar con lo cual es muy difícil que una industria pueda continuar bajo este contexto“, manifestó el presidente de la Cámara de la Construcción de Santa Cruz.