YCRT sigue sin interventor y continúa la persecución a los trabajadores de la empresa
Los trabajadores de la empresa Yacimientos Carboníferos Río Turbio (YCRT) siguen sufriendo la persecución del Estado Nacional que busca achicar el número de la dotación. Durante las últimas semanas, después de que la mayoría de los trabajadores decidiera no adherirse al plan de retiros voluntarios, desde la administración comenzaron a realizar exámenes toxicológicos para ver si consumieron estupefacientes.
Según comentaron a NOVA empleados de la empresa, que la firma no pueda ser privatizada en su totalidad “no deja a nadie tranquilo por lo que ocurrió con Aerolíneas Argentinas, que quedó afuera de la Ley, pero se está viendo un proceso de privatización vía decreto”.
La intencionalidad es clara. Quebrar todo para venderlo. Acá con YCRT pasa lo mismo, está el puerto lleno de carbón y no gestionan la venta. Dónde está el ministro de comercio. Son dólares que no entran al país. La gestión es una verga.
— juanmatiast juan matias torres (@juanmatiast) September 26, 2024
En este sentido, las facultades delegadas le permiten al Gobierno de Javier Milei sortear al Congreso sobre cuestiones económicas. “Ellos dicen que demanda demasiado costo del Estado, pero es mentira”, aseguraron a NOVA los trabajadores.
Por otro lado, contaron que en YCRT “no hay despidos, al día de la fecha, de manera indiscriminada ni sin causa”, aunque aclararon: “Si hay un proceso vinculado a retiros voluntarios con vigencias. Hubo muy pocos porque no hubo aceptación por parte de los trabajadores”.
“Sabemos que el interventor renunció y hay diferentes nombres dando vueltas. Algo que implementaron es una política de control respecto al consumo problemática que tiene como objetivo achicar la empresa por vía de una situación de salud mental”, sostuvieron.
A su vez, según personal de YCRT, hay más de 40 mil toneladas de carbón acopiados en punta Loyola, que es el puerto de la ciudad de Río Gallegos, sin ofertas fehacientes de compradores de ese carbón. “Lo último que sabemos es lo que tomó estado público, que hubo un proceso de sobornos para ciertos intermediarios. Dicen que habría tres compradores interesados, pero son todos trascendidos”, dijeron.
Por otro lado, según admitió un funcionario de uno de los municipios cercanos a la empresa, “lo que se necesita es asegurar la continuidad de la unidad económica productiva en su conjunto, es decir la mina, el ferrocarril, la usina y el puerto, y también hacer las inversiones que se requieren en la planta depuradora que es la que trabaja el carbón y lo dejo en condiciones para poder ser exportado y, obviamente, todo lo que implique poner a punto la infraestructura de la Usina para poder producir energía”.
“Los estudios impacto ambientales están hechos pero lo que se frenó es el contrato con empresas para poder vender nosotros nuestra energía. Con lo que se produce en la usina de Río Turbio podríamos abastecer al conjunto de la provincia”, agregó esta fuente a NOVA.